No es habitual, pero en poco tiempo he visto en la consulta dos jóvenes, uno de cada sexo, con síntomas que se ajustan a esta entidad y que, luego, ha sido confirmada por un especialista.
Las crisis de pánico se caracterizan por episodios bruscos e inesperados, sin causa aparente, de miedo intenso a perder el control, o a que algo horrible va a suceder o incluso miedo a morir, acompañados de síntomas como: dificultad para respirar, dolor en el pecho, palpitaciones, sudoración temblores, sensación de mareo e inestabilidad, hormigueo, nauseas y malestar abdominal.
Por lo general, las crisis duran entre 10 minutos y media hora. En casi todos los casos las personas que sufren un episodio sufrirán algunos más, ocasionando una gran limitación en el desarrollo de las actividades diarias debido a la ansiedad que causan y al miedo a padecer nuevos episodios y a sus implicaciones.
Las crisis de pánico o ansiedad son reales y acusadas. El paciente no finge y esta ansiedad puede afectar seriamente a su vida y a las personas de su entorno. Aunque puede mejorar ocasionalmente, no suele desaparecer a menos que reciba un tratamiento adecuado y específico. La combinación de psicoterapia y medicamentos (existen varios eficaces) previene crisis posteriores y hace que estas sean cada vez menos frecuentes e intensas. Algunas llegan a desaparecer por completo.
Estoy trabajando con Ana Martinez, psicóloga del Centre Itae, en la Unidad de Timidez de niños y jóvenes con un protocolo muy útil y efectivo para mejorar su calidad de vida y la tranquilidad de sus padres. Estamos muy animados.
Estoy trabajando con Ana Martinez, psicóloga del Centre Itae, en la Unidad de Timidez de niños y jóvenes con un protocolo muy útil y efectivo para mejorar su calidad de vida y la tranquilidad de sus padres. Estamos muy animados.
1 comentario:
Como persona que ha sufrido algunos episodios de este tipo, en mi caso el miedo ha perder el control era exacerbado, acompañado de grandes palpitaciones, sudoración y sensación de mareo e inestabilidad. Como bien ha dicho, con una buena psicoterapia y medicación sobre todo al principio, todo se soluciona. La medicación no deja de ser la muleta en la que necesitamos apoyarnos al principio. Ahora bien, en el caso de los trastornos por ansiedad ERES TU EL QUE TE CURAS. Si no pones de tu parte no lo vas a conseguir. Para terminar decir que llevo 14 años sin un solo ataque, y siendo muy capaz de afrontar la vida con otra perspectiva. Animo a todas las personas que lo necesiten.
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