La mayoría de los padres ignora la secuencia del cambio piloso de los varones cuando llegan a la adolescencia. Es durante el período en que muchos se vuelven ecológicos no por convencimiento sino por vagancia: no se duchan ni que los maten. El pelo axilar sale generalmente unos dos años más tarde que el pubiano aunque no siempre ocurre así - a veces, incluso le precede. El pelo facial se inicia en las comisuras del labio superior y alcanza la distribución adulta cuando ha completado el desarrollo genital, siendo la barbilla la última zona en poblarse de pelos.
Otro fenómeno normal que pocos saben es que al adolescente varón le pueden "salir tetas". Las mamas aumentan de tamaño en más de un 60% de los jóvenes durante el cambio (ginecomastia puberal fisiológica) cuando el pene está aumentando más en longitud que en circunferencia, los testículos tienen un volumen entre 6-12 ml y el escroto es grande. La mayoría de estos cambios, poco importantes en apariencia, le preocupan bastante al chico; por un lado le molestan los comentarios jocosos que los adultos le hacer al salirle el bigotillo; por otro, eso de tener tetas es terrible y por las burlas: algunos se niegan a ir a natación, gimnasia, otros cambian de indumentaria poniéndose las ropas, especialmente camisetas, muy anchas. En ambos casos los padres han de apoyarle y afirmarle que es un proceso normal. Le han de comprar una maquinilla de afeitar antes de que él la pida y aconsejarle consultar por internet todo lo que quiera sobre ginecomastia puberal.
Por otro lado, el aumento de pelo ya es un signo evidente de que está llegando a un nivel de crecimiento superior a muchos de sus compañeros y cuánto más rápido salga más pronto será "macho" aunque ahora a muchos le apetece afeitarse el pubis y las axilas. ¡Cosas de la vida!
Aprovecho esta entrada para presentarles un cuadro precioso de Dalí, pintado en 1941, llamado "Adolescencia". Mírenlo bien, es genial como su autor.