viernes, 26 de febrero de 2010

¡Un cortado, para el nene!

Para muchos el cortado es un café expreso al que se le agrega una tercera parte de leche caliente espumosa. Algunos cafeteros agregan antes un chorrito de leche fría y después una cuarta parte de leche caliente espumosa. Para otros un cortado no es más que un café expreso con una pequeña cantidad de leche caliente para reducir la acidez. Es popular en muchos países y hay diversas variantes. En resumen, es la tradicional mezcla con café y un toque de leche. He intentado saber su origen porque a mí me explicaron que era debido a la mala calidad o al mal sabor de algunos cafés y para disimularlo le echaban un poco de leche.

Sea cual fuere su origen muchos millones de personas nos "cascamos" uno o varios cortaditos al día. Yo por la mañana no desayuno y me voy al hospital. Después de la sesión científica (8-8:30h) me voy al bar un momento me tomo un café con leche y me llevo un cortado al despacho. Sentado frente al ordenador, sorbiéndolo lentamente -como Juan Valdez seleccionaba los granos de café uno a uno- , envío y respondo los correos electrónicos.

El otro día vino un renacuajo de dos años y medio dicharachero y revoltoso. Uno de los "problemas" que tenía era que para desayunar protestaba por lo que le daban y gritaba: "¡quiero un cortado!". Los padres se habían comprado una cafetera Nespresso y disfrutaban como locos con su cortado matutino, rápido y limpio antes de llevar el niño a la guardería. El "pájaro" en cuestión empezó a escuchar la palabra "cortado" de una forma habitual en el desayuno de sus padres y los padres me pidieron consejo. Por suerte, nunca se lo dejaron probar y al no tener ni idea les sugerí a los padres que, después del desayuno del nene, le dieran un cortadito hecho con Eko. Yo había tomado ese brebaje de pequeño y no sé de nadie que lo tome pero sigue estando en las estanterías de los supermercados.

7 comentarios:

pobrepapa dijo...

Con mi peque no había manera de que bebiera leche, y gracias a los "cortados" con Eko se fue animando; ahora ya lo toma con Colacao, pero era muy divertido cuando era un renacuajo verlo pedir "café".

Saludos

PRIMA EVA dijo...

¡El Eko! Qué gran invento. Cuando era yo la renacuaja, me encantaba. Sólo me lo dejaban tomar de vez en cuando, y para mí aquello era "hacer una cosa de mayores". MI tía cenaba cada noche leche con Eko y galletitas.

MeGustaSerMama dijo...

Qué bueno.Como decía mi abuela, "si no hago lo que veo, me peo". Mi hijo tiene casi 2 años y le encanta tomarse a cucharaditas parte de mi descafeinado. ¿Cómo puede gustarle algo tan amargo, digo yo?

Paula Martínez dijo...

Efectivamente, el Eko es un preparado de malta si mal no recuerdo (aunque creo que también lleva otros cereales) Yo tuve mi etapa de desayunos con Eko, y recuerdo que estaba bastante bueno.
Por cierto, un tironcete de orejas para el doctor. Hay que salir de casa desayunado.

Diario de una mamá pediatra dijo...

Uy, pues a mis hijas les encanta el café!!! Hay que controlarlas porque a la que me descuido están rebañando los restos de las tazas!
Un abrazo

isita dijo...

Yo odio el café... nunca me ha gustado y creo que nunca me gustará. No creo que mis niños prueben pronto el café, porque mi marido tampoco es muy cafetero y sólo lo toma ocasionalmente.

Y sí, todavía hay gente que toma Eko, como mi madre (que tampoco es muy cafetera). Por eso todavía se vende, digo yo.

Anónimo dijo...

Mi madre tambien toma EKO!! Nunca se me había ocurrido que los niños podian tomarlo.