domingo, 22 de marzo de 2009

Explorando por las las mañanas con prisas...

Diariamente, me levanto prontito para escribir en este blog antes de ir al hospital. Si por cualquier motivo me atraso un poco debo hacer las cosas rápido y corriendo, oséase, mal; la ley de Murphy es implacable y la tostada se me cae por el lado de la mantequilla. Como intento llegar a las 7: 45 para resolver la correspondencia en mi ordenador del hospital, salgo de casa no sin haberme maldecido a mí mismo por la mi torpeza en  no recordar donde he dejado las cosas el día anterior. Mascullando improperios me dirijo a mi jamelgo motorizado y vean un simulacro de lo que ocurre. En muchas ocasiones, una vez en la calle, tengo que volver a casa a recoger lo olvidado y eso suponiendo que ya haua partido raudo y veloz hacia el hospital. El título en femenino es para despistar.

No hay comentarios: