lunes, 6 de julio de 2009

Capítulo MMCCCXLVII. He perdido la batalla pero no la guerra

Resumen de capítulos anteriores. Mi esposa está absolutamente enamorada de perros y caballos. Como el caballo no cabe en casa y ella ya no es tan joven para montar se conforma con los primeros. Hace años, un mal día, mi hija apareció con una perrita recogida en un contenedor. Se la quiso regalar a mi hijo pequeño pero en realidad se quedó en casa durante 13 años. Yo, buen marido, acepté esa cruz con estoicismo cooperando pero sin pasarme. La perrita murió de cáncer y mi esposa quedó desolada y triste. Tenía yo una reivindicación; si había soportado a la perrita 13 años ahora tenía derecho a vivir 13 sin ningún animal en casa durante un periodo equivalente.Sin embargo, las cosas no iban bien. Mi esposa quería otro perro y yo me negaba con buenas palabras. Íbamos andando por la calle y hasta el chucho más sucio y feo le parecía una maravilla.

Capítulo MMCCCXLVII.
Tenía muchos remordimientos ¿me mantenía firme o cedía y metía otro bicho en casa? La solución vino a través de su hermana, también amante de los perros -deben tener un gen "canino", que fue a buscar una perra a una perrera. Mi esposa se convirtió en su "madrina" y la compartían. Había llegado a entrar en casa pero sin pasar de los límites que yo había marcado. Pero héte aquí que, por circunstancias familiares, ¡la perra necesitaba dormir en mi casa!. Gran alegría de mi mujer y gran consternación por mi parte. En un abrir y cerrar de ojos compró colchoneta, almohada, comedero, bebedero y no sé que artilugios más. Pretendía que ¡durmiera en la cama con nosotros! ¿No, no y no!. Aparentemente lo hizo en nuestro dormitorio el la colchoneta al lado de mi esposa...

Al día siguiente la casa estaba llena de miles trozos de papel de diario desgarrados por las fauces del animalito, mis zapatillas sufrieron graves daños, la habitación olía a perro y todo el piso a aroma químico del collar matabichos que lleva. Una maravilla...

¡Esposos, maridos o parejas de una mujer! Necesito vuestra opinión, ¿me voy de casa, la echo a ella, pongo veneno en la comida de la perra, me visto de lagarterana para que cuando entre la perra en casa se pegue un susto de muerte y no vuelva más?

Como en los tiempos de Elena Francis, un marido que no sabe que hacer.

7 comentarios:

Librarian dijo...

Dr. Santi,
No se lo plantée como una guerra: "La guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido". No le dé más vueltas. Esa perrita acabará en casa.

Cristina dijo...

je,je,je... ¿Dice que su esposa ha comprado comedero, cama, y otro tanto de artilugios para el perro? Más claro agua... Librarian le ha dado la respuesta...

;)

¡Saludos, doc, y mucho ánimo!!!

Marcos O. dijo...

Con las mujeres, querido primo, sólo hay una opción inteligente. Mover la cabeza de arriba a abajo, varias veces mientras dices mirándola a los ojos ¡Si cariño! Todo lo demás es buscarse problemas sin solución. En cuanto a tener perro...¡¡¡No hay nada ,mejor!!! Tengo perro desde los 4 años y seguiré teniendo.e

clea dijo...

A mi me pasa lo contrario, es mi marido el que está enamorado de los perros. Yo soy de un pueblo y para mi los perros eran un animal que vivía en el corral, que comía una vez al día las sobras o el puchero y que campaba a sus anchas.
Cuando conocí a mi marido él tenía una perrita de un año. Yo siempre digo que era un "Pack", si me quedaba con uno la otra iba incluída. De esto ya hace más de 10 años. Hemos tenido dos niñas y la perra está un poco celosa, además de enfermita.
Dr Santi, yo opino como ud, si he vivido 11 años con un perro tengo el derecho a vivir 11 años sin, por eso tengo clarísimo que, por ahora, cuando esta perrita falte, no quiero ninguna más, pero clarísimo... palabra del niño jesús.

SRoqueFamily dijo...

Doc, si su mujer le dice que se tire por la ventana, busque la mas baja que al final se tirara, jjjjjjj!! eso si no podemos vivir sin ellas.

Anónimo dijo...

Desde luego...menudos ánimos le dan Doctor Santi!!!
Ahí va mi perla...y si le plantea a su mujer la posibilidad de que ella misma colabore como voluntaria en una protectora de animales?
Así se vería satisfecho su anhelo de cuidar animalitos y usted ganría tiempo...
Saludos

Anónimo dijo...

Dr. Santi.... yo no soy precisamente partidaria de tener animalitos en casa... pero por circunstancias, desde hace un año, tengo en adopcion un yorkshire de siete años, que me da muchas alegrias... y le aseguro que no me gustan los perros...(excepto el mio ahora) y si le sirve de algo cuando mi vecino se entero de la adopcion me dijo:
"ya veras, cuanto mas conozcas a las personas, mas querras a tu perro"
Animo Dr. casi seguro que si lo mira con otros ojos, hasta le da satisfaciones.....
Saludos.