Estos días de frío gélido en los que las plantas se tornan carámbanos ir al hospital en moto es una heroicidad; las manos son lo peor aunque lleves guantes gruesos aunque no mucho para no entorpecer la aceleración y el frenado. Da la casualidad que a la velocidad que voy, más lenta de lo habitual, siempre me toca ir detrás de un bus equipado con gas natural que me sirve de parapeto y voy al rebufo. En esa línea el anuncio posterior es de una hermosa y esbelta mujer de color, en una postura seductora, anunciando una ropa interior con un curioso nombre: Yamamay
(algún malvado andaluz entendería otra cosa) de origen italiano. De subida voy bien acompañado y al salir del hospital otra línea de autobuses también lleva un anuncio con dos hermosas doncellas en paños menores de otra marca que no recuerdo. Me llama la atención que en esta época de crisis y con el frío pelón que hace, se anuncie ropa interior en buses y en paneles estáticos; es evidente que ya preparan la llegada de la primavera. Con los anuncios y con las prendas femeninas me asaltan muchas dudas:
- ¿los anuncios van dirigidos al hombre para que le compre a la mujer dichas prendas?
- ¿por qué es tan cara la ropa femenina y especialmente los tangas?
- ¿por qué los anuncios muestran esas posturas dignas del Playboy?
- ¿la mujeres se sienten más atraídas por las mujeres con esas posturas?
- ¿por qué los desfiles de Victoria´s Secret (dejen entrar a su pareja masculina) tienen tanto éxito?
- ¿ esos anuncios, provocan una imaginen idealizada de la mujer para las adolescentes?
- ¿ por qué las feministas no protestan ante estos anuncios "de mujer-objeto" del deseo?
Tengo más preguntas pero lo dejo aquí. A mí ya me va bien que esas damiselas me acompañen en breves momentos de mi largo trabajo; además tienen varias ventajas adicionales: no te hablan, sonríen o te miran como si fueras el más guapo del mundo y todo ello gratis. Un chollo.