
A modo de ejemplo les sugiero que lean este artículo sobre la comida emocional y los "alimentos consuelo", o lo que es lo mismo, comer como consuelo de la ansiedad. Es importante para los padres poder distinguir si su hijo come por hambre o por aburrimiento (parece tener hambre a todas horas).
Ya es más conocido el sindrome del comedor nocturno, con una serie de características que lo diferencian como ser consciente de lo que hace, del trastorno de la alimentación relacionado al sueño en el que sería "un sonámbulo que va a comer" o comer dormido.
Para acabarlo de adobar, recientemente se ha demostrado que el niño quisquilloso, caprichoso para comer podría apuntar a problemas de salud mental más adelante. Como pueden ver ser pediatra no es tan sencillo..