Acaba de comenzar el curso escolar. Como Profesor Asociado de Pediatría doy seminarios y clases en la Facultad de Medicina y la de Odontología de la UB. En la de Odontología porque es una Licenciatura en la que una de sus asignaturas es pediatría-al fin y al cabo aunque solo "traten dientes" han de saber lo que es un niño, "torearlo" cuando se pone farruco y saber que no hay palanca que les abra la boca.
En la Facultad de Odontología son mucho más jóvenes ya que la asignatura de pediatría, en Medicina, se da al final de la carrera y, por tanto, son mas viejos. Ver estudiantes "mayores de edad" con dos o tres años de diferencia de edad es abismal. Y muy especialmente los varones. Ciertamente muchos parecen un poquito "retrasaditos" comparados con las chicas. Ellos, al menos destacan en algo, son más brillantes en las matemáticas. Yo debo ser la excepción que confirma la regla porque soy una auténtica nulidad para los números. Parezco ser el examinado del famoso chiste del fallecido Eugenio en el que el profesor pregunta: "A ver, cuanto son dos mas dos", el alumno reflexiona y dice serio: "Si no me da más datos..."
Se han hecho muchos estudios sobre las diferentes capacidades de aprendizaje entre el sexo masculino e el femenino. Hasta se ha valorado si los profesores son hombres o mujeres pueden influir en la educación. Se está, incluso, empezando a replantear el volver al sistema antiguo de colegio : "los niños con los niños y las niñas con las niñas". Si a eso añadimos que los estudiantes españoles, según el informe PISA 2006, son de lo peorcito del mercado, apaga y vámonos.
Lo dicho. Los hombres "semos" más tontos que las mujeres pero sin pasarse ¿eh?.
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