Su madre no la podía mantener por problemas económicos y emocionales y la dejó al cuidado de un matrimonio adoptivo. La recuperó pero al cabo de unos meses sufrió una crisis nerviosa y la niña pasó a la custodia su mejor amiga. Ésta se casó y la niña fue dada en adopción a otras familias. Al cabo de un tiempo la niña acusó a un pariente adoptivo de haberla violado y a los 12 años volvió a ser violada, esta vez por uno de los hijos de una adoptante. Para evitar ir a un orfanato se casó con un chico de 21 años del que se divorció posteriormente.


El abuso emocional o psicológico es un patrón repetido de comportamiento de un padre o cuidador que puede ser verbal o no verbal, activo o pasivo, intencionado o no, pero que es interpretado de forma negativa por el niño. Esta forma de maltrato puede ocurrir en muchos tipos de familias, pero es más común en los hogares con múltiples factores de estrés, como los conflictos familiares, problemas de salud mental, violencia física, cuidadores deprimidos o consumidores de drogas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario