sábado, 26 de septiembre de 2009

Soy como Job... ¡Sí, y a lo bestia!

Una vez ya lo comenté; soy como un corderillo. Sigo los consejos de mi fantástico suegro (q.e.p.d.) según el cual él sólo mandaba en casa cuando ocurría algo importante y desde que se casó no pasó nada. Mucha gente no sabe quién era el profeta Job.

Yo me encuentro en la misma situación. Hoy escribo como corresponsal desde París en donde debía entrevistarme con Carla Bruni pero la cumbre del G-20 me lo ha impedido. Así pues me he dedicado a recorrer un poco esta bella ciudad con la mala suerte de que mis huesos han ido a parar a un hotel de una conocida cadena española en donde me han dado una habitación de pena. No podía llamar al Elíseo así que he intentado hablar con la directora pero se había tomado el día libre según palabras de la recepcionista. La verdad es que, en ocasiones, te da tristeza ver como lo español va a menos mientras otros países tiran hacia adelante. Las otras parejas de matrimonios que me acompañaban en este viaje relámpago han sentido lo mismo.

En la televisión he visto como ZP ha ido a la reunión de Pittsburgh como mirón, ufano porque Obama le permitirá entrar en la Casa Blanca y que Carla Bruni ha sido la estrella de las esposas de los jefes de estado. El FMI ha confirmado que nuestras perspectivas de crecimiento son malas aunque muchos se empeñan en decir lo contrario. Seguiré teniendo paciencia con nuestro futuro, nuestras instituciones y nuestras empresas.

He enviado una carta a la directora del hotel y espero su respuesta. Si no la recibo desvelaré el nombre del mismo para que ustedes no caigan en la misma trampa.

PS:
  1. El título de la entrada es el comentario de uno de los componentes del grupo.
  2. Los muy sagaces habrán sabido captar que la Sra. Bruni no me conoce de nada y me he echado un "farolillo" para distraer a los lectores.
  3. Una evidencia. La edad no perdona y cada vez nos volvemos más maniáticos y egoístas incluidos los matrimonios longevos. En un viaje relámpago como éste es posible ver como crujen las cuadernas del "barco común" por motivos nimios.
  4. Premio al que acierte qué se aloja en ese edificio; es muy facilillo y el premio se acumulará a otras promociones.


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2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues no lo acierto, pero ya que ha mencionado la cumbre en EEUU y la presencia de ZP... ¿que tal una entrada dedicada ala famosa foto con sus retoñas?. Me encantaría ver la foto bajo su sarcasmo y buen humor...

Elias Gràcia dijo...

La próxima vez vaya al Waldorf Trocadéro. Durante los 3 años que he vivido en París es el que he utilizado para los amigos y familiares que nos han visitado y ahora lo hago yo cada vez que voy.