miércoles, 14 de mayo de 2008

Yo soy partidario de un estado laico

El gobierno actual apuesta por un estado laico. No me gusta nada nuestro "presi" del Gobierno que ha soltado "inexactitudes" sobre nuestra economía, boyante antes de las elecciones, menguante después de ellas. En otros muchos temas a troche y moche pero en esto del estado laico estoy de acuerdo.

Durante años fuí a colegio que si no estoy equivocado se insinúa en el libro "La sombra del viento" de Ruiz Zafón. Jesuitas de Sarriá. Colegio de "pijos" en aquellos tiempos aunque yo era de la típica familia de clase media; no me faltó de nada pero tampoco me sobró. No tengo malos recuerdos excepto de los Ejercicios Espirituales; más que espirituales eran de "acojonamiento" -perdón- si incumplíamos la ley divina nos echaban al "fuego eterno". Eso del "fuego eterno" nos marcaba o por lo menos a mi me hizo mucho daño. En vez del amor a Dios te inculcaban el temor a Dios. Estar cociéndote toda la eternidad tiene que ser algo incómodo, aburrido y pesado.

Una vez salí de allí me di cuenta que uno no escoge su religión; la acepta por el lugar donde ha nacido. Si me hubieran parido en Arabia sería polígamo -para "horror" de nuestra vicepresidenta al hacerse una foto con uno- y a mi muerte me recibirían las huríes del Edén Fantástico.

Las religiones han sido y son causa de males catastróficos. No hay más que mirar a nuestro alrededor dinero-política-religión es una combinación maléfica. Cada familia debe escoger el estilo de vida y espiritual que prefiera.

Doctor, ¿usted cree en Dios? No, supongo que debe haber un Ser Superior al que espero tardar en conocer.

9 comentarios:

Cristina dijo...

Estoy de acuerdo con usted, en favor de un Estado laico: debería haber libertad de elección religiosa. Es decir, habría que dejar a los jóvenes, ya con mayoría de edad, que decidan si quieren ser bautizados y hacer la comunión y la confirmación, o decantarse por otras religiones, y no impónerselo...(de hecho, así lo he hecho con los míos, aunque en el colegio obligan a la comunión, etc. Ya decidirán cuando sean mayores).
Saludos, doc. ;-)

Anónimo dijo...

No debemos confundir términos, una cosa es la libertad religiosa que por supuesto y otra el "Estado confesional" que según wikipedia: "Un estado confesional es el que se adhiere a una religión específica. Esa situación puede ser simplemente resultado de los usos y costumbres o tradición, o reflejarse en sus respectiva legislación, especialmente en la constitución. El que el estado reconozca una religión oficial, no significa que otras religiones no se permitan practicar libremente, bien públicamente o bien restringidas al ámbito privado". Por supuesto rechazo los extremos pero ¿que hay de malo en transmitir a nuestros hijos valores como el perdón, el amor al prójimo o el respeto a los padres?

Cristina dijo...

Yo transmito el amor, el perdón, el amor al prójimo... a mis hijos. No confundamos tampoco otros términos...

Anónimo dijo...

Curiosamente, en relación con el tema, hoy ha salido en la prensa la noticia de que se subasta una carta de Einstein con comentarios sobre la religión en la que opinaba que se basa en leyendas "bastante infantiles" y es un "producto de la debilidad humana".

http://www.elpais.com/articulo/sociedad
/Einstein/opinaba/religion/producto/debilidad/
humana/elpepisoc/20080514elpepisoc_8/Tes

De acuerdo con lo expuesto en el blog y en el artículo.
Yo personalmente, me acuerdo de dios cuando “truena” ........y poco.


No tiene nada que ver con el asunto que nos ocupa, pero no puedo resistirme a reproducir la frase atribuida a Einstein:
“Mi mujer tiene un gran físico”.

Anónimo dijo...

Hoy voy con mucha prisa,pero, aprovechando que estamos en época de rendir cuentas a Hacienda, recomiendo a los que compartan la opinión del Dr. Santi que, en el impreso de la declaración, marquen la casilla "otros fines sociales". Con este gesto, el 0'7 de vuestros impuestos no irán a parar a las manos de la iglesia católica (me niego a ponerlo con mayúsculas), sino a otras organizaciones.

Anónimo dijo...

Hola a todos,
En cuanto a lo que dice Eva de marcar la casilla de asuntos sociales, yo propongo lo contrario y os diré por qué: ese dinero va destinado a ONGs y me fío menos de ellas que de las labores que hace la Iglesia. Aunque no soy católico ni practicante de ninguna religión, tengo que reconocer que la Iglesia católica, a pesar del daño que haya podido causar en el pasado, cuenta con miembros bienintencionados y dedicados en cuerpo y alma a ayudar a los demás (ya sé que los de las ONG también). Pero si parte de mi dinero va a la Iglesia, por lo menos tengo la garantía de que se empleará bien; si por el contrario lo entrego a las ONGs, lo más probable es que se pierda por el camino y se lo embolse algún granuja.
Saludos,
Pep

EVA dijo...

Yo opino como lady jekyll, pues yo no soy creyente, pero no obstante respecto a todo el mundo y como no a mi hijo cuando sea mayor que elija él mismo. Ahora tiene edad para hacer la comunión, y en la escuela se habla mucho de esto; aunque por los comentarios que escucho la gente está más pendiente del restaurante, fotos, regalos, etc... que de lo que se trata en sí. En fín haz el bien y no mires a quien ya seas creyente o no.

Anónimo dijo...

Simplemente a mi, mi fe, me hace ser mejor persona y deseo lo mismo para mis hijos, ellos también podrán elegir el día de mañana si quieren seguir o no en la Iglesia, la religión es una opción jamás una obligación. No se trata de imponer, se trata de intentar ser como padre lo mejor posible, cada uno a su manera, todas igualmente respetables y buenas.

Dr. Santi dijo...

Me gustan las opiniones. todas tienen su parte de razón. Como ya expresé una vez me gustaría que hubiera un listado de Fundaciones, ONG, Congregaciones religiosas homologadas por el Estado. Me encantaría saber adonde va mi dinero y la organización me enviara un recibo. si sabes donde va en realidad tu dinero eres más generoso. He sido un manirroto con los Maratones de TV3