El 25% de los niños tienen los llamados dolores de crecimiento. Suelen aparecer por la tarde o antes de acostarse aunque los más llamativos son los que le despiertan mientras está durmiendo. La intensidad del dolor varía de un niño a otro, y la mayoría son intermitentes (hasta una o dos veces por semana) con dos picos de frecuencia: entre los 3 - 5 años y los 8 - 12 años de edad. Lo que duele es la musculatura de los muslos y las pantorrillas, no los hueso ni las articulaciones. Un síntoma de que son benignos y no hay una enfermedad grave como osteomielitis o artritis es que mejoran con a el masaje suave y no dueles al comprimirlos. Si hubiera una enfermedad importante el dolor se intensificaría. Una característica típica es que al día siguiente han desaparecido ya que ni molesta ni el niño cojea.
La causa más probable de estos dolores sea la gran actividad física realizada durante el día. El tratamiento consiste en relajación, un masaje suave o un analgésico si el dolor parece muy intenso.
1 comentario:
Aunque se ha investigado el origen musculo-esquelético, ortopédico y/o vascular de estos "growing pains", tenía entendido que se trata de un problema de sensibilización del sistema nervioso central, un descenso del umbral del dolor.
¿me equivoco?
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