Ha sido uno de los más destacados neumólogos infantiles y experto en Fibrosis Quística (FQ). Lo ha dado todo por su profesión, por sus enfermos y por esa tremenda enfermedad. Tanto José Luis como yo hemos visto en el transcurso de nuestras vidas como una enfermedad con un pronóstico muy malo ha cambiado radicalmente hasta lograr una calidad de vida excelente y una gran longevidad. Mucho queda por hacer todavía pero él ha contribuido al cuidado y crecimiento de los niños afectados por esta enfermedad y a otros muchos con problemas respiratorios con una dedicación admirable. Como guinda al esfuerzo de todos los que se dedican a esta enfermedad y, en el el momento de su marcha, la FDA acaba de aprobar el primer medicamento personalizado para un tipo genético de la FQ.
Le conozco desde hace muchos años. Fuimos juntos a los jesuitas de Sarriá y más tarde nos encontramos en el hospital. Con una entrega y tesón admirables ha logrado crear la Unidad de Neumología aunque sus esfuerzos no siempre han sido valorados como merecía. No importa. Él sabe que deja una especialidad que perdurará para siempre en el hospital.
El día 24 de febrero, a las 21.30 h. celebramos con él una cena/homenaje en el restaurante Tres Molinos. Los que quieran asistir contacten con Silvia Muñoz (silviam@hsjdbcn.org)
2 comentarios:
Dr. Santi, no me queda claro si éste señor se ha jubilado o ha pasado a mejor vida. Espero, por la calidad de persona que dices que es, que sea lo primero, y que lo segundo tarde muchos años en pasar.
Noe.
No ha pasado a mejor vida - bueno, no lo sé, depende de cómo se interprete. Se jubila.
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