Primero fueron lo chinos con la melamina y ahora los americanos con el perclorato. Los investigadores del U.S. Centers for Disease Control and Prevention (CDC) han demostrado que 15 marcas de leches de fórmula para bebés de EEUU estaban contaminadas con perclorato un componente del combustible de cohete también detectado en el agua corriente de 28 estados y diferentes territorios de ese país. Dos de las marcas más contaminadas, derivadas de leche de vaca, eran consumidas por el 87% de los niños en el año 2000. No se han dado los nombres de las marcas. Más detalles sobre este descubrimiento lo pueden encontrar en el número de marzo de 2009 de la revista Journal of Exposure Science and Environmental Epidemiology.
Doctor, ¿cómo es posible una cosa así? Pues parece ser consecuencia de la época de la "guerra fría" en la que se hacían pruebas con misiles continuamente produciendo una contaminación ambiental enorme. El perclorato es un compuesto químico muy tóxico que afecta al desarrollo del cerebro del feto y del bebé. Según los expertos la suma del perclorato contenido en la leche más el que tenga el agua alcanza unos niveles superiores a los marcados por la Environmental Protection Agency (EPA) (Protección del medio ambiente) como seguros aunque algunos científicos todavía los consideran demasiado altos, es decir poco seguros.
Y ¿en España? Hombre, no tenemos cohetes pero fuentes contaminantes todas y más. Desde la bomba atómica que cayó y descubrió el pescador de Palomares "Paco el de la bomba", las centrales atómicas con su fugas, los vertidos químicos en los ríos o desastres como el de Aznalcóllar no sé en España si el Departamento de Medio Ambiente funciona o no porque nunca pasa nada importante. Palomares sigue siendo una de las poblaciones más radiactivas de España pero a juzgar por la salud de Fraga Iribarne que se bañó en esas aguas le rejuvenecieron de tal manera que es como si hubiera ido a un balneario anti-aging.
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