miércoles, 25 de marzo de 2009

Contra más prohibido más deseado

La Iglesia estableció hace años una calificación moral, distinta en todos los países en cuanto a su forma, pero idéntica en cuanto a su objetivo, y por la que se establecen matices que diferencian lo que puede o no perjudicar a una persona de determinada edad o formación.

Esta calificación, actualmente vigente, es la siguiente:

1.– Niños hasta catorce años.
2.– Jóvenes, de catorce a veintiún años.
3.– Mayores, de veintiún años cumplidos en adelante.
3R.– Mayores; con reparos, la misma edad, pero con «sólida» formación moral.
4.– Gravemente peligrosa (léase rechazable).

Cuando iba al cole nos daban, no recuerdo si cada semana o cada mes un folleto llamado SIPE en la que nos ponían los estrenos con esa calificación. Lógicamente intentábamos ir a las 3R ó 4 pero en los cines no te dejaba pasar si te veían pequeñajo pero yo tuve la suerte de cambiar mi voz de niño por una "potente y viril". A mí me dejaban entrar y a los otros no.

Ahora hay, también, sistemas de clasificación para videojuegos en los que me declaro insolvente e ignorante total. Veamos cómo está el asunto. Existen diferentes criterios para decidir qué videojuego comprar: el precio, la moda, las recomendaciones, etc. Uno de los factores fundamentales para definir la compra suele ser la clasificación que el mismo título sugiere. En el envoltorio podemos ver diferentes tipos de clasificación que podemos encontrar en los empaques.

Símbolos como A, B, C… D y Z son utilizados por el sistema CERO, el símbolo se encuentra en la parte frontal del empaque y remite a la edad para la que se sugiere el contenido. Esta clasificación es empleada en Japón, puede encontrarse en algunos juegos importados o sin traducir y significa lo siguiente:

A.- Todas
B.- 12 y más
C.- 15 y más
D.- 17 y más
Z.- 18 y más (restringido por el gobierno Japonés

Otra clasificación comúnmente encontrada es la sugerida por ESRB de EEUU y que clasifica los videojuegos según su contenido de violencia, sexo, lenguaje, temas, etc. Los símbolos empleados son:

EC: (Early Childhood o Infancia temprana"): sugerido a partir de 3 años.
E: Everyone o Para todos): temas sugeridos personas de 6 años en adelante
E10+: (Everyone 10 and older o Para todos mayores de 10 años): Temas y contenido sugeridos para personas de 10 y más años
T: (Teen o Adolescentes): Para edades de 13 años o más.
M: (Mature o Maduro): el contenido es sugerido para sujetos de 17 años o más.
AO: (Adults Only o Sólo Adultos): Contenido con escenas amplias de violencia, sexo o racismo, se sugiere únicamente para adultos.
RP: (Rating Pending o Clasificación Pendiente): La llevan productos que han sido sometidos a evaluación ante la ESRB y están en espera de una categorización final.

La proliferación de palizas, accidentes y otros tipos de violencia en los videojuegos motivó recientemente el acuerdo de dieciséis países europeos, entre ellos España, para establecer un código de autorregulación y una clasificación por edades de los distintos juegos. Este código paneuropeo, denominado PEGI (Pan European Game Information ), ha clasificado desde abril de 2003 más de 2500 títulos. En España, la Asociación de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento (ADESE) ha realizado varias campañas, en colaboración con el Instituto Nacional de Consumo o el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, entre otros, repartiendo folletos para sensibilizar a los padres y ayudarles en la compra responsable de videojuegos según la edad y madurez, tanto afectiva como psicológica, de sus hijos. No se trata de una clasificación obligatoria. Son los propios fabricantes del videojuego los que voluntariamente pueden o no entregar sus títulos al Instituto Holandés de Clasificación de Material Visual, . En el lateral de las cajas, el consumidor puede encontrar un recuadro negro con un número blanco muy visible y unos símbolos. El número es la edad a partir que se recomienda: más de 3 años, más de 7 años, más de 12 años, mayores de 16 años y mayores de 18, según el grado de violencia que contengan. Los en forma de iconos aparecen iconos que indican la presencia de temas o escenas con lenguaje soez, discriminación, drogas, sexo, violencia o miedo, véanlos:

Comentario aparecido recientemente en la revista Pediatrics: aunque el sistema PEGI se desarrolló para proteger a los jóvenes frente a contenidos objetables, este sistema convierte actualmente a los videojuegos en frutos prohibidos y deseados. Talmente como cuando yo era un chaval -la historia se repite.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muchas gracias por la información, hace tiempo que la estaba buscando.
Felicidades como siempre por el blog
PCRW