Tener que operar a un hijo causa gran preocupación en sus padres pero también depende un poco de la rapidez con que se tenga que realizar la intervención. Generalmente, en pediatría, hay tres tipos de operaciones: a) Las urgentes, por ejemplo, una apendicitis en las que no hay tiempo para pensar. A los padres les preocupa salvar al niño, no piensan en la anestesia.
b) Las que permiten un tiempo para reflexionar y tomar una decisión pero si se pospone mucho puede afectar gravemente al niño por ejemplo intervenciones de corazón. Posponerlas a partir de un tiempo determinado hace que ya sea inútil, el deterioro es irreversible.
c) Las no urgentes y sin fecha establecida como fimosis, hernias umbilicales, adenoides u otras. En estas sabemos, porque así lo expresan los padres, que gran parte de la inquietud y miedo que se siente al está causado por la anestesia y no por la propia intervención. Sin duda, el responsable de esa sensación de miedo es la desinformación y el desconocimiento que la mayoría de las personas – incluidas muchas del ámbito sanitario- tienen de la anestesia.
Los padres a los que han de operar un hijo piensan y preocupados comentan al médico: “El niño es muy pequeño, no aguantará la anestesia y menos la operación”… “Preferimos esperar hasta que sea más mayor” “No queremos que pase la angustia de estar solo antes de entrar en el quirófano le afectará psicológicamente”.
Tanto la medicina como la anestesia han cambiado radicalmente en los últimos años. La cirugía también. Ahora es frecuente poder operar a un niño y que el mismo día vuelva a su casa. A este tipo de cirugía ambulatoria. En nuestro hospital tenemos una unidad fantástica llamada UCA (Unidad de Cirugía Ambulatoria). Los niños son acompañados por payasos (Pallapupas) y se lo pasan bomba. Vean este vídeo auténtico de la UCA de nuestro hospital y comprobarán como el niño entra y sale del quirófano la mar de contento.
6 comentarios:
Recientemente operamos a Pau de una reducción de amígdalas, y aunque la operación no era nada problemática, el hecho de necesitar anestesia general nos lo hizo pasar fatal.
La probabilidad de complicaciones puede ser mínima, remota, pero existe, y con nuestros peques no estamos dispuestos a correr ningún riesgo. Por eso, cuando no se producen los dos primeros casos (urgencia/necesidad) nuestra atención se centra en la anestesia.
En fin, un mal trago necesario.
Por otro lado me parece genial el tema de los payasos, un 10 para Sant Joan de Deu.
He visto el video y creo que si mi hija tuviera que ver a esos "payasos" (2 años), se hecharía a llorar.
¡Qué fantásticos estos pallapupas!! Francamente originales! Por cierto ahora capto lo de "palla", que debe de significar "paliar" en catalán; claro que sí: estos payasos no solo hacen reír, sino que "palian las pupas" de los peques! GENIAL! :)
Los padres que hemos vivido una anestesia en nuestros hijos pequeños en Sant Joan de Deu sabemos que nunca se puede agradecer lo suficiente el trabajo, la actitud y las formas de TODOS los que intervienen en el proceso, y los payasos ayudan mucho a pasar el trago al niño (por supuesto) y a los papas asustados tambien.
Gracias y adelante con tu blog, Santi.
PD: De las cosas que mas me aterrorizan cuando visitamos a nuestro pediatra (o nuestro hospital)cuando hay problemas es la ceremonia de la apertura del sobre marrón.... En el video sale y me ha dado un respingo. Es algo así como cuando se quiere dar emocion a la nominación de los Oscar, pero con un resultado macabro.¿Nadie ha pensado en suprimir los sobres y evitar esos segundos de angustia e incertidumbre?
Recientemente mi hija ha necesitado una intervención en Sant Joan de Déu (biopsia de riñón), y aunque estaba programada una anestesia general, ya en el quirofano y no sabemos porqué razón, decidieron hacerlo solo con anestesia local. Esto le provocó mucha angustia, tambien sintió dolor que era algo que nosotros le habíamos prometido que no pasaria, angustia que un mes despues sigue sintiendo en forma de ansiedad y que precisa de atención psicológica. Os recomiendo que siempre que podais eviteis estos malos ratos a vuestro hijos.
Soy enfermera de quirófano y de la UCA en Sant Joan de Déu y debo reconocer que una de las preocupaciones principales de los padres es la anestesia.
Recomiendo a todos los padres explicar a sus hijos a qué vienen al hospital: que se dormirán, que al despertar tendrán X parte de su cuerpo "curado", pero que les molestará, etc. El saber tranquiliza por igual a padres y a niños!
Y un 10 a los Pallapupas! Son los mejores y nos hacen reis a todos! :)
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